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Vigoleno: un increíble rincón, una increíble belleza

Castillo de Vigoleno

Vigoleno, es de esos lugares escondidos, increíblemente mantenidos a través de los años. Pertenece al municipio de Vernasca, en la provincia de Piacenza, en la que se encuentra el castillo del mismo nombre. Cuando vivía en Bolonia me puse unos objetivos que eran visitar pequeños pueblos de la Emilia Romaña, de esos que te marcan en las guías o en los mapaas como "ciudades más bellas de Italia", ya les hablé aquí de Castell'Arquato y hoy le toca a otro lugar increíble como dice el título de esta entrada: increíble por su belleza y por lo bien que ha llegado hasta nosotros, ciudadanos del siglo XXI, esta auténtica villa que es un ejemplo de cómo eran las ciudades medievales fortificadas de la región.

Se encuentra en una cima entre el valle de Ongina y el de la Stirone, sobre una altitud de 350 m que permite disfrutar de unas excelentes vistas y contemplar el panorama de los valles y colinas circundantes.
 

Si te gusta la fotografía haz dado con el pueblo ideal, puedes hartarte de captar lugares muy pintorescos.
 

Iba con mi amante, ...con ella a todas partes.


Su fundación se remonta al siglo X la primera fecha documentada es el año 1141, cuando era un puesto avanzado en el camino de Parma a la ciudad de Piacenza. El castillo pasó por muchas manos, principalmente de la familia Scotti, Pallavicino, Piccinino, Farnese,... Fue destruida y reconstruida repetidamente en los conflictos entre las familias.
 

Ya en tiempos más cercanos, en el año 1922 la princesa Ruspoli Gramont lo restauró, siendo célebres algunos actos y fiestas sociales donde se congregaban actores, escritores y gente famosa de la época como la estrella de cine Mary Pickford, la escritora Elsa Maxwell, o el pianista Arthur Rubinstein. Ya en los ochenta fue el escenario de una parte del rodaje de la película Lady Hawke de Richard Donner con Rutger Hauer y Michelle Pfeiffer.

La iglesia de San Giorgio


San Jorge es la iglesia románica del siglo XII que sin duda sorprende. Para empezar abres la puerta, y no hay nadie, contemplas todo el esplendor de la iglesia, su oscuridad llega a impresionar ¡asusta quizás! Tiene tres naves divididas por cuatro pares de poderosos pilares redondos con capiteles esculpidos con figuras.
 

Se ha sometido a renovaciones renacentistas y barrocas, pero gracias a una restauración de 1963 se han sacado viejos frescos y mantiene hoy su aspecto casi original, austero e imponente. La fachada está embellecida por un portal tallado con columnas de capiteles y una escultura (primera de las fotos, arriba) que representa a San Jorge. En el interior los frescos de San Giorgio en el ábside del siglo XV y San Benito.
 

Para comer yo estuve en Al Castello, un pato estupendo por cierto y un vino de la casa muy bien de precio.



Comentarios

Anónimo ha dicho que…
¡Pero qué maravilla de lugar! No sólo es fascinante su antiguedad y que esté tan intacto, sino que la sucesión de habitantes haya dejado cada uno sus huellas y estilos... realmente me admira tener estos testimonios de la historia. Mención especial a tu "amante", se la habrá pasado genial!

Ale Martinez Notte
Viajes y Rutas ha dicho que…
Caramba Paco, que sorpresa más agradable de pueblo. He de reconocer que no había oído hablar nunca de él pero creo que ya no se me va a olvidar (digo creo, porque una va entrando una en unas edades...) Me ha parecido una pasada el castillo, pero la Iglesia de San Giorgio me ha cautivado!. Qué maravilla! Gracias por mostrárnosla!! Espero siguientes entregas impaciente!
Un abrazo
Carmen
Kris ha dicho que…
Ay Paco, empecé a leer el post y hasta que no leí Bolonia estaba realmente perdida. Un buen descubrimiento este lugar, que la verdad, en las fotos se ve tan solitario que casi parece un decorado para "Juego de Tronos".
Un abrazo